Estelí, Diciembre 12 de 1993
Memoria de un en el restaurante “La Plancha” en la Ciudad de Managua.
Se conversaba que opinar sobre la pareja (hembra-macho) dentro del marco de nuestra sociedad es muy complejo; se decía que la educación que recibimos desde niños es ineficiente, que desde el inicio (hogar-escuela) llegando hasta la profesionalización universitaria, la enseñanza sobre este tópico es inexistente. Que se encuentran carreras universitarias en que el tema se estudia debido a que las clases
elementales de ellas así lo exigen, no por que la materia sea catalogada con la importancia que se merece.
Se comentaba que posiblemente la pareja puede ser vista sólo sobre su capítulo sexual y como este aspecto ha sido tabú es de suponer se homogenizan (sexo-pareja) y así, se vuelven, en su esencia, inexistentes en el estudio de la vida, siendo ambos elementos principales e inseparables de las mismas.
Se estaba de acuerdo en que estos fundamentos elementales, tanto en la vida vegetal como en la vida animal, deberían tener un campo destacado en cualquier pénsun académico, pero además de no ser así, es inconcebible como ansiamos conocer el universo sin conocernos nosotros mismos.
Esta travesura literaria tratará de exponer lo que se platicó sobre los aspectos de la pareja en el sentido intrínseco; todos los factores marginales serán excluidos, porque si se tratara de abordar en macro el asunto, lo que se estaría escribiendo sería un discurso científico para el cual no se tiene capacidad.
Se consideró que la pareja es biológica por lo tanto genética y a la vez social; estos elementos tienen en ella influencia irradicable y superlativa y ellos en sí obedecen indefectiblemente a leyes de la naturaleza. Bajo estas premisas se intentó penetrar adentro de un análisis que, si no dejó ninguna conclusión, se está seguro que dejará inquietudes y comentarios.
El punto cardinal de este asunto fue, que la pareja (hembra-macho) es en sí una contradicción, el uno es la negación del otro y esto los confirma como tal; ellos se atraen obedeciendo a la ley de los contrarios, pero su contradicción es implícita en su naturaleza.-
Dado que este aspecto no se toma en cuenta y no se estudia en sus manifestaciones, inconscientemente obliga al uno y al otro verse como contrarios, produciendo en cada uno de ellos una reacción defensiva, autoamparándose en todos los marcos de sus relaciones; esto no se analiza con la seriedad del caso y se vuelve altamente negativo a la base de una buena relación.
Se abordó el habitat y la territorialidad, se consideraron sinónimos y a la vez, integral sustancia en la naturaleza animal. Todos los anima racionales e irracionales llevan en el meollo de su ser esos componentes que, de un modo u otro, aplican a los universos de sus vidas. En el reino animal irracional estas características se respetan rigurosamente, pero en el reino animal racional se puede decir que se desconocen.
Se vio como, cuando una pareja se adviene a compartir cuarto y cama, uno de ellos está sometido al más fuerte; esta fuerza no es muscular ni física, es fuerza psíquica. El que psíquicamente es más poderoso impone sus reglas de vida al débil y éste vive esclavizado, sometido a costumbres, gustos y caprichos del otro, lastimado profundamente en su amor propio. Aunque esto parezca baladí es causa de un alto porcentaje de separaciones.
Después se analizó la Selección Natural, y se entendió que en el reino animal irracional es donde se manifiesta casi a la perfección este fenómeno, veamos:
El Dr. Neville Cross Cooper, expresó que cuando una venada entra en celos y le es necesaria su pareja, ella no se deja poseer por cualquier venado.- Aquí se inicia un rito extraordinariamente maravilloso; la venada expide un olor característico del celo, coquetea con la manada, hace cabriolas sensuales y, cuando los venados se disponen a poseerla, ella huye en carrera desenfrenada devorando valles, cañadas, montañas y macizos; esta huida no es por negarse a ser poseída, es todo lo contrario, ella quiere que el venado que la posea sea el capaz de alcanzarla, así sabrá que al que se sometió, es él más fuerte, más resistente y mejor conformado de la mandada, por lo tanto va a parir hijos del mejor macho de ese grupo.-
El Dr. Simeón Rizo Castellón, comentó que también en las abejas se ve algo similar.- Las abejas escogen una reina y a ésta le proporcionan los mejores cuidados, la mejor alimentan y la fortalecen hasta hacerla la abeja superior de la colmena. Al mismo tiempo, en otra parte del colmenar tienen preparándose a abejas macho escogidas especialmente, a éstos, comúnmente la gente les llaman zánganos, pero no es así, es un ejército de machos que está siendo entrenado para el sagrado Llegado el momento, salta la reina al espacio, y tras ella va todo el enjambre que fue preparado para ese rito; la lucha es titánica, la reina vuela con poderosa maestría y los machos van tras ella con el fin particular de ser el mejor y poder poseer a su reina. Esta es otra modalidad de asegurarse que las crías de la reina tendrán como padre el macho con mejores condiciones en todos los órdenes de su conformación.-
Se admiró como en todos los seres del reino animal irracional, vemos diferentes, bellas manifestaciones y ritos de la Selección Natural: Juegos, luchas, competiciones y otras diversas formas de culto a la ENTREGA y éstos, se pueden observar con gran facilidad con sólo son un poco a la observación sobre cualquier especie.-
Cada una de estas expresiones son una verdadera lección sobre la esencia de la vida en la lucha por la conservación de la especie, siempre procurando su superación constante.- Preocupó comprender que sólo el reino animal racional no razona sobre esto y más bien parece perseguir irracionalmente su extinción.
La unión en la pareja es una necesidad implícita en su verdad, somos seres sociales y no solipsistas, pero el descuido sobre la materia a hecho en el humano, casi desaparecer el interés de formar pareja conveniente y evitar el duplo sólo por sexo indiscriminado y está científicamente comprobado que este estilo sólo lleva a la degeneración.-
Expresé que en el mundo campesino, es donde por su pureza ingenua, se ha conservado, en cierta forma, algo de los ritos por la Selección Natural.- La campesina, en su primer experiencia sexual, ya sea por libre albedrío o por unión legal, civil o religiosa, para entregarse al que a escogido como su hombre, inconscientemente inicia una especie de lucha, danza o ballet nupcial realizado en el lecho; ella se escurre, cierra sus piernas, se desliza, escuda sus partes con las manos, ríe, sexualiza movimientos y coquetea con todo su cuerpo hasta que su hombre llega poseerla a plenitud; maquinalmente ella queda en completa satisfacción, puesto que el hombre que la poseyó luchó hasta merecerle.
Yo sostenía que esta manifestación estaba reducida al campesinado y que en las ciudades se había perdido, pero el Dr. Simeón Rizo Castellón y el Dr. Neville Cross Cooper, contradijeron mi afirmación e irónicamente expresaron que "ese elemento” no había desaparecido en la civilización de las ciudades, que sólo había transformado sus valores. En las ciudades, en esas selvas de cemento y concreto, la Selección Natural se mantiene bajo símbolo del dinero; el que tiene más es el mejor postor y es el preferido por el miembro menos pudiente.- En el marco económico se da la lucha por la supuesta Selección Natural de la modernidad; en ese medio que llamamos civilización, sin importar un comino que esa práctica les lleve a la decadencia.-
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