¿IBEROAMERICANISMO?

Para mi hijo Wangki,
quien me sugirió este artículo.

Estelí, 12 de Noviembre del 2007

En días recién pasados se llevo a efecto en la República de Chile, la XVII Cumbre Iberoamericana; con sumo júbilo vi y oí a grandes líderes del continente hacer propuestas americanista, valientes, retadoras y aleccionadora sobre las verdades históricas de nuestra América; se denunció a la OEA como instrumento de dominación de las fuerzas imperiales, pero, al mismo tiempo, con gran pesar oí al Presidente Daniel Ortega y al Presidente Hugo Chávez, proponer la creación de una nueva organización continental, antípoda de la OEA, bajo el nombre de Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) ¿Por qué iberoamericana? ¿Por qué no una designación verdaderamente nuestra? ¿Qué tenemos que ver nosotros con Iberia, si no es recordar las barbaries que los ibéricos vinieron a cometer con nuestros antepasados y sus posesiones? En una organización de la América hispano hablante, donde se van a exponer y discutir ponencias y buscar soluciones sobre los intereses de pueblos americanos ¿qué tienen que estar haciendo los conquistadores, explotadores y flageladores de esos pueblos víctimas? No se puede olvidar jamás, jamás de los jamases, que los ibéricos realizaron en nuestro pueblo el genocidio más grande de la humanidad, asesinando al 90% de la población americana para apropiarse de sus riquezas.

¿Qué es en realidad ser ibérico?

La Península Ibérica, es la más occidental de las penínsulas europeas en el Mediterráneo, formada por España y Portugal y, el Sistema Ibérico, es una serie de nudos montañosos de España, que constituyen el núcleo fundamental de la formación geológica de la península; ahora, ibero o ibera se dice de los individuos pertenecientes a algunos de los pueblos establecidos antes de la colonización fenicia y griega, desde el sur de la Península Ibérica hasta el Mediodía de la Francia actual. Analizando con lupa estas definiciones, no veo por donde ni por qué, los pueblos o el territorio de América tendría que ser ibérico. En los Diccionarios Castellanos se dice: Ibero América, denominación que se le da a los países de América, descubiertos, conquistados y colonizados por españoles y portugueses. Hay que tener muy en cuenta que estos libros son hechos por europeos y ellos a través de la lengua han impuesto también su dominación y expresan en ellos lo conveniente a sus intereses imperiales, pero una cosa es lo que ellos piensan y otra es que nosotros nos dejemos enredar en su red idiomática y acatemos lo que nos dicen sin un ápice de razonamiento. Para los europeos, nosotros debemos sentirnos felices por sus gloriosas conquistas sobre nuestro territorio y por haber venido ellos a civilizarnos. ¿Qué concha?

Así mismo nos han hecho llamar latinoamericano, hispanoamericano y otra serie de adjetivos calificativos que no caben en absoluto para identificarnos como habitantes de la América no gringa; manifiestan que nos bautizan así porque hablamos español y que este idioma tiene raíces latinas, sin tomar en cuenta que cantidad de pueblos (millones de habitantes) de estas latitudes no habla español y en muchas ocasiones ni lo conocen y son universo de comunidades verdaderas dueñas autóctonas del continente.

Nuestros pueblos autóctonos poseen lenguas bellas, figurativas, expresivas, sonoras, onomatopéyicas y de amplio espectro comunicativo; impuesto a sangre y fuego no obligaron a hablar español, lengua latina, que aunque no queramos es una realidad innegable en parte de nuestro medio social, característica que es parte del mestizaje que llevamos y mantenemos en nuestra realidad, como también tenemos que soportar otros guindajos que lucimos de los aspectos europeos que tuvimos que adoptar contra toda nuestra voluntad.

Hay que rechazar, oponerse contundentemente a ese horrorosos adjetivo de iberoamericano, hispanoamericano o latinoamericano, el aceptar este oprobio es como rendirle honores, aplaudir, hacerle loas y aceptar felices todas las iniquidades imperdonables que España y Portugal, cometieron en la época en que se enteraron que nosotros existíamos, su satánica ambición los condujo a realizar acciones vandálicas en pro de una conquista inenarrable sobre nuestros pueblos.

Hay, entre los conglomerados sociales de los pueblos Americanos, gente nuestra que piensa y siente como europeo, pero estos grupos son pequeños, enfermos y débiles de conciencia, son hijos de la malinche, los que somos la mayoría, los guerreros de estas tierras, no debemos nunca aceptar esa denominación conquistadora, sinónimo de sometimiento; nosotros debemos exigir ser llamados americanos y, como resultado de un accidente inevitable como es tener de vecinos a los anglosajones del norte, aceptar ser, Naciones Nativo Mestizo Americanas y Caribeñas, digna designación que incluye los pueblos que habitan desde el Río Grande hasta la Patagonia, incluyendo los pueblos del Caribe, declarémoslo así: Somos Naciones Nativo, Mestizo, Afro Americanas y Caribeñas, o cualquier otro calificativo que, excluyendo a los gringos o yanquis, pueda surgir con espíritu estrictamente americano, pero nunca, jamás, ninguna otra designación que nos extranjerice como esas que nos hemos dejado imponer sin tener más sentido que la dominación y ser dominados.